Muchas personas ven como una alternativa viable el solicitar préstamos para liquidar deudas. Sin embargo, ¿es una buena decisión? ¿Realmente conviene pedir dinero que no se tiene para solventar compromisos?
La respuesta corta es no. Visto desde la eficiencia en el uso de recursos, pedir préstamos para liquidar deudas existentes es como tratar de tapar un hoyo abriendo otro.
Principalmente, se debe tener en cuenta que pedir algún préstamo para solventar deudas implica pagar más dinero de lo que se tiene contemplado. Y es que, al pedir un nuevo préstamo se podrían generar intereses desde cero por la cantidad solicitada; además que en algunos casos se deberán cubrir comisiones.
El pedir préstamos para liquidar deudas es una alternativa que visualizan principalmente aquellas personas que atraviesan momentos económicos complejos y que se les dificulta poder seguir pagando algún compromiso. Así, lo que se busca al pedir un nuevo préstamo es refinanciarse y lograr, por ejemplo, nuevas condiciones que abran paso para pagar menos mes con mes, sobrellevar de mejor manera el crédito, e incluso, contar con dinero en efectivo extra.
Esto sucede principalmente cuando una persona ya no cuenta con la liquidez suficiente para cubrir cierto pago mensual. Por ello, la opción que vislumbra es contratar un nuevo crédito que implique reducir el monto a desembolsar mensualmente, esto para saldar la deuda, aunque esto implica pagar más en términos generales.
Tomar este tipo de decisiones se debe hacer con mucha cautela y planificación, pues de lo contrario, lo que pudiera parecer una solución, a la larga corre el riesgo de transformarse y convertirse en un problema grande que tome un efecto bola de nieve.
Se debe considerar que pedir un nuevo préstamo con la intención de pagar menos en la mensualidad, implica que la deuda se extenderá por mayor tiempo, además que se pagará más intereses. Esto podría duplicar o triplicar el monto de la deuda actual.
Evita pagar deudas con otras deudas
Como verás, el buscar pagar deudas con otros deudas es consecuencia de una mala administración financiera, en donde las personas llegan a un punto en el que se ven rebasadas y buscan solventar sus compromisos mediante este camino.
En el tema de pagar deudas no hay soluciones mágicas: se requiere disciplina.
Lo ideal es llevar una buena administración de ingresos y egresos, y siempre tener control sobre el pago de deudas. Sin embargo, cuando se presenta una situación de imposibilidad para hacer frente a los compromisos, lo mejor es tomar decisiones con toda la información posible.
Aquí te hemos dicho que solicitar un préstamo para liquidar deudas es una medida que te costará mucho más y que no terminará con el problema de fondo. Por ello, antes de elegir este camino, contempla el escenario completo.
Si vas a tomar esta ruta, debes considerar hacer una planeación real y efectiva, que te permita tener noción plena sobre tus ingresos y compromisos, con la finalidad de establecer una estrategia para generar ahorro. Todo esto, en aras de mejorar las finanzas personales y contar con una posición adecuada desde el punto de vista económico para solventar los gastos y compromisos de deuda.
La planeación es la mejor herramienta para evitar llegar a problemas financieros. Lo correcto siempre es estar al tanto de los movimientos que se realizan y actuar con prudencia; no provocar un escenario de focos rojos que te hagan pensar en pedir un préstamo para liquidar deudas.
Lo importante en todo este contexto es buscar alternativas. Sí rotundamente te encuentras en una situación de endeudamiento severa, no caigas en la tentación de pedir préstamos para liquidar deudas; o peor, de ignorar el tema y simplemente dejar de pagar.
Recuerda que ante escenarios en los que ya no puedes pagar más, un camino ideal siempre es el negociar el pago de las deudas con los acreedores. En ese sentido, por ejemplo, hoy existen alternativas como las llamadas reparadoras de crédito, empresas que son especialistas en este rubro y que te ayudan a solventar las deudas sin necesidad de pedir más préstamos.
