Deudas

¿Has recibido mensajes de cobranza extrajudicial?

Frecuentemente, las entidades bancarias y financieras se enfrentan a clientes que se atrasan en el pago de los créditos que solicitan, ya sea por olvidos, por dificultades económicas o simplemente porque no quieren.

En esos casos, las empresas se ven en la necesidad de contactar constantemente a dichos clientes que han caído en mora para recordarles sobre sus saldos pendientes y ofrecerles diversas alternativas de pago en caso de que atraviesen complicaciones económicas.

Pero, si no obtienen respuesta por parte de los deudores, las entidades financieras tienen el derecho de recurrir a la cobranza extrajudicial.

¿Qué es la cobranza extrajudicial?

La cobranza judicial es una de las medidas a las que recurren las instituciones acreedoras, como bancos, financieras o personas físicas, para reclamar el pago de una deuda, pero sin una orden judicial de por medio; es decir, sin involucrar a las autoridades.

Un proceso de cobranza extrajudicial tiene el objetivo de que el acreedor llegue a un acuerdo con el deudor para liquidar los saldos vencidos, y así evitar llegar a instancias judiciales. Esto quiere decir que esta práctica es permitida, y es un derecho de los acreedores para recuperar el dinero prestado.

Además, cabe mencionar que este proceso puede llevarlo a cabo la misma institución acreedora, o bien un tercero como los despachos de cobranza.

¿Qué pasa cuando mi deuda pasa a cobranza extrajudicial?

Si ya llevas más de 90 días de atraso en el pago de algún crédito, debes saber que tu acreedor tiene el derecho de recurrir a la cobranza extrajudicial, ya sea por medio de su propio departamento de cobranza o de un despacho externo. 

Lo que pasará en este caso es que los cobradores comenzarán a tratar de comunicarse contigo constantemente y por diversos medios:

  • Llamadas telefónicas
  • Mensajes de texto SMS o WhatsApp
  • Correo electrónico
  • Correo
  • Visitas a tu domicilio

Lo anterior durará todo el tiempo que te tardes en liquidar tu deuda, y la frecuencia de estas llamadas, mensajes y visitas dependerá del monto que debas y de la disposición que muestres para pagar.

No obstante, es importante aclarar que las acciones que se realicen mediante la cobranza extrajudicial deben apegarse a buenas prácticas y a los lineamientos marcados en la ley, y, si los cobradores recurren a acciones violentas o ilegales, pueden ser sancionadas hasta con cárcel.

Mensajes de cobranza extrajudicial

Como ya hemos visto, las entidades financieras o bancarias que recurren a la cobranza extrajudicial tienen varios canales de comunicación para contactar a sus clientes morosos; sin embargo, no todos son efectivos.

En el caso de las llamadas telefónicas, por ejemplo, los cobradores corren el riesgo de que los clientes no atiendan o cuelguen la llamada al escuchar quién está del otro lado de la línea.

Lo mismo pasa con las visitas domiciliares, las cartas o los correos electrónicos, que hoy en día muestran una baja considerable en el contacto efectivo con los deudores.

Por ello, las instituciones y despachos de cobranza prefieren los mensajes de texto, ya sea vía SMS o por algún servicio de mensajería instantánea, como WhatsApp, pues no requiere que el cliente esté disponible en el momento.

Tipos de mensajes de cobranza

Los despachos de cobranza recurren a los mensajes de texto en diversas situaciones, como:

  • Recordatorio de pago
  • Aviso de saldo vencido
  • Aviso de alternativas de pago como quitas o descuentos
  • Envío de promociones por pago
  • Notificación de pago electrónico no realizado
  • Agradecimiento por recepción de pago

¿Cuáles son las ventajas de los mensajes de cobranza extrajudicial?

Entre las ventajas que los despachos de cobranza encuentran en los mensajes de texto se encuentran:

  • Es un medio de comunicación mucho más efectivo y económico que los tradicionales.
  • Los clientes también prefieren la comunicación vía SMS o WhatssApp, ya que pueden responder tranquilamente en sus tiempos libres.
  • En caso de que se necesite aclarar alguna cuestión, cobradores y deudores pueden intercambiar imágenes, videos y audios. 
  • La atención se vuelve más personalizada e interactiva.
  • Toda la información queda por escrito, por lo que se evitan dudas, olvidos o confusiones.