Si quieres tramitar una tarjeta de crédito por primera vez, seguramente tienes varias dudas. Pero, no te preocupes aquí te aclararemos todas para cuando vayas a una sucursal, tengas toda la documentación en regla para obtener tu tarjeta de crédito.
¿Qué necesito para sacar una tarjeta de crédito?
Es bastante sencillo. Basta con que te acerques a cualquier sucursal bancaria y si llevas tu credencial de elector, comprobante de domicilio y comprobante de ingresos, sin duda, saldrás con un plástico.
Mejor aún, si ya cuentas con una cuenta de ahorro en un banco, seguramente, en ventanilla, ya te han ofrecido un crédito “preaprobado” en varias ocasiones. Sin embargo, podrías detenerte a reflexionar para qué necesitas la tarjeta de crédito y si has revisado entre todas las alternativas cuál es la más apropiada para tus necesidades.
Requisitos para sacar una tarjeta de crédito
Lo que se necesita para tramitar una tarjeta de crédito básicamente le da garantías a la institución financiera de que cubrirás tus adeudos. Se trata de requisitos que también puede cumplir un extranjero viviendo en México. Aquí, los básicos para solicitarla.
- Ser mayor de edad
- Tener una cuenta bancaria
- Comprobante de ingresos
- No estar en Buró de Crédito
¿Pedir o no pedir crédito?
Gestionar una tarjeta de crédito no es necesariamente una duda existencial. Es importante identificar con claridad cuál es tu situación financiera y por qué solicitas esa herramienta de financiamiento. Debes saber que los servicios financieros como el crédito son precisamente “servicios” o herramientas por las que tienes que pagar.
De hecho, esa es la primera claridad que debes tener: el crédito no es dinero propio. El que no sean gratuitos significa que por eso generan cargos o comisiones y también intereses, en caso de que no pagues de manera puntual.
Así que si utilizas crédito debes pagarlo con todo y los intereses que genera. El gran error es pagar solo los montos mínimos y no saldar el adeudo de manera importante. Esa mala práctica provoca que la deuda jamás se reduzca.
Esto sumado a que si se sigue usando el plástico para hacer gastos recurrentes, entonces el adeudo crece y si tu ingreso sigue siendo el mismo, entonces la deuda se puede hacer inmanejable. incluso llegar a una situación de impago y dejar en Buró de Crédito una marca negativa.
En cambio, si decides gestionar esa primera tarjeta de crédito porque quieres comenzar a construir un historial crediticio positivo en el Buró, porque tienes claro que en el futuro podrás utilizar una línea de crédito alta para adquirir ciertos bienes, entonces significa que serás cauteloso para utilizar esa herramienta financiera.
Razones equivocadas para pedir una tarjeta
- No me alcanza mi salario
La regla de oro para manejar una tarjeta de crédito es no gastar más de lo que ganas. Si tienes eso claro y quieres una tarjeta de crédito para aprovechar las compras a meses sin intereses, entonces debes aprender a manejar ese tipo de compras que pueden salirse de control.
Si aprendes cómo funcionan los meses sin intereses, puedes usarlos a tu favor. sin embargo, cuando no lo tienes claro o si olvidas destinar mensualmente una cantidad para cubrirlo, entonces puedes caer en una situación de sobreendudamiento.
- Me dicen que es importante
Es importante porque saber utilizar el crédito te genera un historial positivo frente al Buró. Y si en tu estrategia de finanzas personales está adquirir un bien en el futuro que implique que tengas una línea de crédito amplia, por ejemplo la compra de una casa, entonces será importante que tengas un buen récord.
Hay quienes aconsejan tener crédito disponible en caso de “emergencias”. Sin embargo, ese tipo de gastos imprevistos cubiertos con dinero que no es tuyo te puede generar un desbalance en tus finanzas personales y, por lo tanto, quizá te sea difícil cubrirlo.
La mejor estrategia de finanzas personales para esos casos es el ahorro, pues en caso de una enfermedad o de un despido inesperado o, simplemente, por una mala racha que te obligue a “apretarte el cinturón”, tendrás un “colchoncito” que te ayudará a sobrellevar la situación.
- Necesito crédito para apoyar a alguien más
También es frecuente que las personas se animen a gestionar su primera tarjeta de crédito porque sus padres o su cónyuge están en una situación de impago y al recibir las tomentosas llamadas de los acreedores, te piden que les eches la mano.
Sin embargo, debes tomar en cuenta que un adeudo no se puede pagar con otro. Y si el monto que se debe es superior a los 100 mil pesos y los ingresos son insuficientes para cubrirlo, entonces tú también podrías perder tu viabilidad financiera.
Lo mejor que puedes hacer para ayudarle a otro es recomendarle que acuda con los especialistas. Si ya es tarde para que renegocie su adeudo con las instituciones financieras, entonces puede acudir a una reparadora de deuda que le explicará cómo solucionar su problema a través de un acuerdo por “quita”.
¿Cómo salir de una deuda de tarjeta de crédito?
Ante una situación de sobreendeudamiento no se deben tomar decisiones desesperadas y hay que reflexionar por qué se perdió el control de los préstamos que se volvieron impagables. Lo más importante será hacer una cita con los expertos que te expliquen cuáles son las alternativas para recuperar la salud de las finanzas y para volver a ser sujeto de crédito.
Las reparadoras de crédito son intermediarios entre las personas que han dejado de hacer frente a una o diferentes deudas y las instituciones que se encargaron de ofrecer el crédito. Se han convertido en un gran aliado para algunos deudores, porque les ofrecen asesoría sobre cómo establecer un plan de pagos, que se ajusta a su capacidad de ingreso, para ahorrar un monto que permita saldar sus compromisos con sus acreedores.
