Si tienes algo de dinero guardado y estás pensando en dejar de esconderlo debajo del colchón, ten en cuenta que existen distintos tipo de ahorro, y cada uno se puede adaptar a tus necesidades y posibilidades.
Lo primero que debes saber, y que es el principal incentivo para que dejes de guardar tu dinero debajo del colchón, es que al depositarlo en un banco, puedes conseguir que tu dinero aumente.
En cambio, la dejar el dinero en tu casa, con el tiempo va perdiendo de valor como consecuencia de la inflación, dado que los precios de los productos y servicios aumentan, y tu sigues teniendo la misma cantidad.
A grandes rasgos, los mismos mil pesos, que suponiendo tienes, un año después te alcanzarán para consumir menos que hoy.
¿Cuáles son los diferentes tipo de ahorro?
Los bancos, y prácticamente cualquier institución financiera, autorizada para captar dinero, te ofrecerán dos tipos de ahorro: a plazo y a la vista.
Antes de continuar, para evitar un fraude, ten en cuenta que las únicas instituciones autorizada para captar dinero son los bancos, las sociedades financieras populares y las cajas de ahorro.
Una vez que sabes eso, puedes elegir el tipo de ahorro que más te convenga, a la vista, por ejemplo, significa que tu dinero estará disponible en todo momento; sin embargo, el rendimiento que te dará será muy bajo, igual a la inflación o incluso menor.
En cambio, a plazo significa que no lo podrás retirar en cierto tiempo, que puede ir de 3 meses, 6 meses, un año o más, en este caso el rendimiento será superior, pero tampoco mucho, si acaso un poca más respecto a la inflación.
Esas dos alternativas te ofrecen tasas de rendimiento fijas, es decir, no importa lo que pase, el banco te dará el dinero adicional que te prometió cuando realizaste el contrato.
Este tipo de ahorro es recomendable en caso de que necesites tener tu dinero a la mano y seguro, es decir, que lo necesitarás en un futuro cercano.
También hay otras alternativas
Si eres un poco más aventurero y el dinero que tienes no lo necesitarás en el corto plazo, más allá de ahorrar, la mejor opción es invertir.
Para eso te puedes acercar a un banco, o bien, a alguna casa de bolsa o gestora de fondos de inversión. Esas instituciones analizarán cuál es tu situación exacta y tu nivel de riesgo, con base en eso te ofrecerán un plan de inversión.
A diferencia del ahorro, aquí no te garantizarán un rendimiento, pues este dependerá de los mercados financieros, es decir, como puedes ganar, también puedes perder.
En este tipo de inversiones debes tener paciencia, y mantener tu dinero por varios años, pues así como habrá años malos también habrá buenos, y la historia ha enseñado que en el largo plazo, los mercados dan buenos dividendos.
Fondo para tu retiro
Si lo que más te preocupa es cómo vivirás en tu vejez, lo mejor que puedes hacer es ahorrar para tu retiro.
En este caso, una de las mejores opciones es a través de tu Afore, pues en los últimos años, estas instituciones han dado mejores rendimientos que muchos otros instrumentos financieros.
Además, en caso de que decidas dejar el ahorro hasta el final de tu vida laboral, tu pensión se incrementará, pero también puedes hacer uso de ese ahorro voluntario en el momento que los decidas.
Ahora que ya sabes que existen distintos tipos de ahorro, seguro hay uno que se adapta a tus circunstancias. No lo dudes y ahorra, porque nunca se sabe cuándo se puede necesitar dinero de emergencia, o bien, hazlo sólo porque tienes un objetivo, como comprar un carro o una casa.