Seguro has escuchado hablar varias veces sobre los intereses, pero quizás no te has detenido a entender del todo su función y cómo elegir un interés acorde a las necesidades financieras que tengas. En este artículo aprenderás a diferenciar los tipos de interés que existen y cuáles son sus ventajas y desventajas de cada uno de ellos.
¿Qué es el interés bancario?
El interés bancario es aquel rendimiento que tiene el banco por prestar dinero a una persona, el interés varía de acuerdo a las condiciones del solicitante es decir puede que la tasa de interés sea más alta para una persona que tiene problemas en la Central de Información de Riesgos, que para una persona que no tenga deudas y pueda pagar sin problemas su crédito.
¿Cómo se calcula el interés de un préstamo?
El interés de un préstamo o crédito puede ser variable de acuerdo al monto del crédito y los plazos a pagar. Es decir entre más alto es el préstamo y el plazo es largo, los intereses tienden a ser más altos que a una persona que tiene menos préstamo y lo paga en un periodo más corto.
Lo que sí es un hecho es que siempre que hay un préstamo o crédito existirá el interés, pero este puede variar de acuerdo al tipo de interés seleccionado, monto, plazo e incluso con la entidad bancaria o financiera con el que se haya solicitado.
Tipos de interés
- Interés fijo: como su nombre lo dice es aquel que es fijo y no cambia de acuerdo a la duración del préstamo, es decir si el interés general está siendo afectado por factores externos, no perjudica el interés que pagas por mes.
- Interés variable: este contrario sí afecta el pago del préstamo, ya que va variando a lo largo de la vida del crédito. Este puede tener la ventaja de cuando el interés es bajo, nos beneficiamos, pero si sube, nos afecta porque los montos se actualizan de acuerdo a la tasa de interés.
- Interés mixto: es un híbrido entre el variable y el fijo, funciona de la siguiente manera, el monto del interés a pagar se puede mantener fijo por unos meses y luego cambiar a variable.
- Interés simple: son aquellos intereses que se liquidan al final del periodo acordado del préstamo.
- Interés compuesto: son aquellos que se suman al capital hasta terminar el periodo acordado del crédito.
- Interés moratorio: es aquel que se suma si tu deuda no es liquidada en los montos fijados en un principio.
¿Qué tipo de interés me conviene el fijo o variable?
Al momento de elegir un interés que pueda ser el adecuado a tu deuda, debes tomar en cuenta las ventajas y desventajas de cada uno, por lo que aquí te las compartimos:
Ventajas del interés fijo
- No tiene cambios, los montos serán los mismo de inicio a fin
- Son más para deudas a largo plazo como hipotecas o automotrices
Desventajas del interés fijo:
- Suelen ser más alto en algunos casos, por lo que no podrás cambiarlo
- Si es alto, es posible que tu deuda tarde más en liquidarse
Ventajas del interés variable
- Cuando tiene una tasa baja te beneficiará porque pagarás menos por tu deuda
- Si tu deuda es a corto plazo y la tasa se mantiene baja, no pagarás mucho interés.
Desventajas de interés variable:
- Puedes terminar endeudándose si la tasa sube y no puedes pagar
- Si tu deuda es a largo plazo, tus gastos se verán afectados mes a mes
¿Cómo aprovechar la tasa de interés a tu favor?
Si estás por solicitar un crédito o préstamo y buscas no pagar tanto interés por tu deuda, sigue estos consejos para cuidar tu bolsillo:
- Elige plazos cortos
- Abona más de lo que puedas a tu deuda
- Elige una tasa de interés fija si tu deuda es a largo plazo
- Evita que los montos a pagar mensual sean “cómodos” ya que generan mayor interés
¿Qué hacer si el interés ya me rebasó?
Si tienes problemas para pagar tus deudas porque los montos son altos y el interés moratorio no deja de subir, acércate a una reparadora de deudas como Resuelve tu Deuda, que te brindará asesoría financiera para poder liquidar tu deuda.